UN SECRETO.
UNA BODEGA.
UN RESTAURANTE.
Juntos... EN EL CENTRO DE MADRID.
Todavía hoy quedan en Madrid algunas bodegas subterráneas. Y una de ellas, en pleno centro de Madrid, en el número 4 de la calle de san Blas, se encuentra reconvertida actualmente en restaurante.
La bodega, formada por varias galerías (una central más espaciosa y de techos más altos que se une con otras dos a través de un túnel abovedado) conforma un espacio tan mágico como laberíntico en el que, dónde antaño se situarían las tinajas con el vino, en la actualidad Raúl Muñoz ha habilitado pequeños espacios en los que comer o cenar constituye un auténtico privilegio tanto por el entorno en sí como por las delicias gastronómicas que nos ofrece en su carta.